Ya están puestas nuestras almas para
buscar en las calles -que tantos siglos se
callan- esa luz que, tras de sí, traerá el
cortejo de los días que forman esa Semana
por la que todas las demás existen

martes, 7 de septiembre de 2010

La Hermandad de los Aceituneros niegan a los vecinos de la Barriada de la Paz la visita de la Virgen

''Los vecinos de esta barriada, hemos tenido en momentos de nuestra vida y en el interior de nuestra mente, pequeñas frases de devoción, amor y confianza a nuestra Madre.

Imposible de enumerar las veces que pronunciamos y escribimos (cada vez que nos identificamos) su nombre de la Paz.

Cuando en 1965 se inauguró la Bda de la Paz, su constructor y entonces Hermano Mayor de la Hermandad, quiso sembrar la fe en esta zona de Utrera rotulándola con el nombre de su titular.

Casi medio siglo mas tarde la siembra sigue dando cosecha.

Con más ilusión que nunca, con el recuerdo cercano de la visita de la patrona, los que aquí vivimos, soñamos con engalanar nuestras calles para recibirla.

Nos avalan cientos de firmas, solo a nivel de barriada, y por la experiencia anterior con la Virgen de Consolación, el evento podría colaborar con la unión y solidaridad de los vecinos incluso de otras religiones.

Entre los actos previstos por la hermandad para honrar a la Virgen de la Paz en su cincuenta aniversario, está la salida en procesión por el centro y a los vecinos de la barriada que lleva su nombre nos gustaría que una vez más en su historia se incluyera dicha barriada en el recorrido.

Hace más de quince siglos un monje escribió que los cristianos deben creer siempre, por todos y en todas partes.

Cuando una devoción mariana surge, de una parte del pueblo cristiano, que va por un camino áspero y sufrido por circunstancias sociales, Maria puede alcanzarles con su gracia por su gran poder de intercesión.

Quizás surja el impedimento de lugar conflictivo bajo la de cualquier otra excusa, por eso mismo no pretendemos un afecto pasajero, sino una fe viva que se traduzca en imitación. Desde nuestro estado de ánimo necesitamos el testimonio de la esperanza de que el mal no tenga la última palabra.

Vivimos diariamente la alteración del orden y como enseñaba San Agustín, a la paz se debe tender con la aportación de todos.

Pedimos a los organizadores del evento del día 25 de septiembre, que cumpliendo en toda regla su lema, aporte a esta barriada la oportunidad de invocar desde sus hogares a la Santísima Virgen de la Paz para que interceda en la tranquillitas ordinis.''

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